Por la cresta

Hola, mi nombre es Miguel Angel Rojas, tengo 26 años, soy soltero y tengo un hijo. Bueno... ahora ¡corran mujeres sin corazón!, ¡sin sentimientos!. Si, si, tengo un hijo y que, desprécienme si quieren no me interesa... mmm... Mierda.
Todo estaba bien hasta que dije "tengo un hijo". No es fácil encontrar una pareja teniendo un retoño bajo el brazo, te ven como si tuvieras una espinilla horrible o una enfermedad contagiosa que te deformara el espíritu, la alegría y tu vida para siempre. Algunos son mas mala onda y te dices care'palo "herí entero de güeon", y la que mas me emputece, "estay cagao". Por otra parte los padres de tus amigos te ven como un mal ejemplo, " vez lo que te puede pasar si no te cuidas," tu amigo es un irresponsable”. Haaaaaa...bueno, paciencia. Lo mas difícil de todo esto es que te hacen sentir como si tu vida joven y con un gran futuro por delante se te ha escapado de las manos. Esta bien la cague pero que le voy a hacer, mi hijo es parte de mi vida, no lo puedo borrar de mis antecedentes, ni lo puedo extirpar como quien se quita un tumor o algo parecido. No quiero que me mal entiendan y que crean que lo quiero olvidar o borrar de mi vida, no es así, lo asumo con grandeza y responsabilidad pero eso no significa que crea que esta sociedad es injusta y cruel a veces.
Como hacer las cosas bien, como no cagarla, alguien me pude decir que es lo que hay que hacer.

Son muchos los que están en esta situación, son varios los que exigen un poquito de comprensión, pero somos pocos los que decimos ¡VALLANCE A LA CRESTA!
Álvaro se llama mi hijo y es el mejor niño que conozco, el único cabro chico que soporto. Pero para conquistar chicas eso no importa, ¿verdad?
(soy un mal partido)